Itinerario 18 días por Tailandia (Parte I)

Tailandia, la tierra de las sonrisas

Itinerario por Tailandia - Enero 2012

Día 1- Bangkok 

Llegamos un caluroso martes al aeropuerto de Suvarnabhumi de Bangkok. Después de más de 12 horas de avión, de mal dormir y mal comer en el avión, nos disponemos a descubrir la ciudad de las mil sonrisas.

Pasamos de coger taxi, ya que la cola era inmensa y no teníamos muchas ganas de negociaciones, ni regateos así que cogimos la vía más fácil, rápida y económica: el Skytrain.

Una de las paredes de Suk11

Teníamos la suerte que nuestro guesthouse, estaba justo en frente de la parada de Nana. Suk11, aún siendo un albergue, lo recomendamos 100% por el trato, el buen ambiente que se respira, por la originalidad, el precio, la localización...en definitiva..todo!

Nos encantó tanto el staff, como la gente que se hospedaba allí, todo el mundo era muy amable. No hay que olvidar que es un albergue, hay lo justo pero lo necesario, además debo añadir que el restaurante estaba muy bien, del mismo rollo, y se comía a buen precio y muy buenos platos tailandeses. Y el desayuno ya era lo más!!!

Absolutamente recomiendo Suk11 si vais a Tailandia, y buscáis algo de calidad-precio.

Después del check-in, nos dirigimos a Khao San Road, comimos por ahí, hicimos las primeras compras, disfrutamos del ambiente guiri total!

Y nos hicimos nuestro primer masaje tailandés ...&%$·#&%& Madre mia!!! Menos relajarnos, de todo! Pero contracturas fuera, eso seguro!! Nos reímos muchísimo, aún recordamos nuestras caras... y qué pena que no tuvieramos la cámara en ese momento!! jaja

Probar los masajes de Charlie!

Después nos dirigimos a visitar el barrio de China Town, del que después de perdernos por sus callejuelas y mercados en los que no vimos ni a un sólo turista, salimos con el estomago más que revuelto.... Ahora entiendo lo de no encontrar ni un sólo turista. 

Acabamos el día, en el centro comercial MBK, del que no sé si por cansancio, pero no disfrutamos mucho... Sabía que las compras eran mucho mejor en Chiang Mai, por lo que decidimos no comprar nada e ir cenar en un japonés en la 5 planta y volver al guesthouse ya que al día siguiente nos esperaba un laaaaargo y turístico día.

Día 2 - Ko Ratanakosin (Gran Palacio)

¡¡¡Pero qué calor que hace en Enero en Tailandia!!! 

Desayunamos y listos con nuestras cámaras y objetivos dirección el Gran Palacio. Decidimos coger el Skytrain (siempre la opción más barata) bajarnos en Shapan Taksin y desde el embarcadero de Central Pier coger un recorrido en barco por el Chao Phraya hasta el embarcadero del Palacio Real, el Tha Chang. Muy chulo. Puedes ver como viven las familias cerca del río, y se agradece el airecito del barco ya a las 10 de la mañana!

Desde ahí, seguimos a un grupo de turistas que van hacia el Gran Palacio, unos 10 minutos andando y llegas al centro del meollo:

Mercadillos singulares en las aceras, gente en los suelos vendiendo todo tipo de instrumentos, olores de frituras, especies, turistas por doquier, monjes budistas, taxistas, tuk tuk, motoristas, todo aquello mezclado con el calor de media mañana...parece tener un orden desordenado....y puede ser realmente extraordinario a la vez que agobiante!

Entramos en el recinto, pagamos 3 entradas por el precio de una, ya que te meten en el mismo paquete, un museo y una casa-mansión Vimanmek a la que no queríamos, ni pensábamos ir. Lo mejor es ir aceptando este tipo de tomaduras de pelo en todos los lados, acabas acostumbrándote.

El Gran Palacio es espectacular, la estructura y magnitud de los edificios, el gusto recatado y la ostentación y alarde de poder y riqueza es palpable en cada centímetro de arquitectura.

Detalle Gran Palacio Wat Phra Keo

Entramos en el Wat Phra Keo, el templo de Bangkok donde se encuentra el Buda Esmeralda, mucho más pequeño de lo que te imaginas.

Cerca, pero un poco apartado se encuentra el Wat Pho, el templo que alberga el inmenso Buda Reclinado, y Wat Indrawiharn, con su Buda Luang Pho To de 32 metros de altura.

Después de una visita tan turística nos apetecía algo más alternativo, y decidimos volver a la parte del río más cercana en taxi, y contratar con un barquero una visita de 1.30h por los canales (klongs). Así que nos dirigimos al embarcadero de Thien Chang y alquilamos una excursión en lanchita.

Podíamos elegir entre una hora y una hora y media, y realmente con una hora nos hubiera bastado, ya que el trayecto de ida es realmente interesante, pero el de vuelta se te hace repetitivo, y eso que no pasas por los mismos sitios a la ida que a la vuelta.

Es bonito alejarse de la ciudad por los canales, y ver como familias humildes viven cerca del río, ver las casas, mujeres tejiendo en los telares, ver niños jugando en el agua. La verdad no vimos apenas turistas realizando este recorriendo, cosa que se agradece y es realmente original!

Puesta de sol desde Chao Praya. Precioso.

Este día estábamos agotados, así que nos duchamos y cenamos en el mismo Suk11, y la verdad genial, pudimos tomar unas copas, y dar una vuelta por a zona de Sukhumvit que hay bastante de ambiente...aunque nosotros buscábamos algo más de tranquilidad, y sin querer acabamos metidos en un centro de masajes, que recordamos cada día de nuestras vidas!!

No sabemos si era por lo cansados que estábamos, o porque era el mejor centro de masajes al que nunca habíamos ido....pero una gozada!! Nos hicimos el masaje de pies q

El centro se llama RainTree, nos atendieron súper bien, estábamos solos porque ya era tarde, y nos pasaron a una sala como con un lago central, con cascaditas, super relajante....tanto que hasta nos quedamos dormidos!! 

Medio groguis, a dormir, que al día siguiente teníamos excursión!

Día 3 JUEVES  Kanchanaburi - PARQUE NACIONAL ERAWAN 
(Excursión 700 THB aprox /pers)

Decidimos coger esta excursión el primer día en Khao San Road, quedamos a las 8 de la mañana con el taxista que nos pasaba a recoger por el hotel, cogimos la autopista, y para el parque nacional!

El parque se encuentra a 65 km de Bangkok. Tiene una superficie de 550 kilómetros y es conocido por sus cascadas con sus 7 niveles, y por unas cuevas.

El taxista era súper divertido y estaba un poco loco perdido, pero nos hacía reír muchísimo!

PN Erawan, una de las cascadas

Llegamos al parque sobre las 12 ya que por el camino nos fuimos parando y haciendo fotos, y que si ahora un agua, y que si ahora tengo que sacar dinero... así que se nos hizo las tantas, llegamos y comimos en el mismo restaurante del parque, comida incluida en el precio, muy bueno por cierto. Además en el precio de la excursión teníamos incluida la entrada al parque que son 200 THB. 

Cuando acabamos empezamos a subir por las cascadas... Es precioso, aunque la ruta es durilla trayecto arriba, y más después de comer, subir 7 niveles, para ver las 7 cascadas. El trekking no es muy complicado en si, pero hay veces que la pendiente es de 45 grados, por lo que hay que armarse de paciencia y seguir un ritmo constante. Como el parque lo cerraban a las 16h, decidimos ir deprisa hacía la ultima cascada y verlas a la bajada.

Metitando en Erawan

Cuando bajamos aprovechábamos para tirarnos en el agua, para refrescarnos, había mucha gente local que había ido a pasar el día, incluso vimos gente haciendo rituales, colocando unas telas, velas e inciensos a los árboles.

Aguas azules hasta en la montaña

¡Os aviso! Habían unos peces enormes, que estaban esperando a que te metieras en el agua para succionarte los pies, consiguiendo una especie entre de cosquillas y angustia....¡Os podéis imaginar mis gritos!

A la vuelta, como teníamos tiempo, y el taxista era enrollado, nos dijo que podíamos pasar a ver el Puente del Rio Kwai. Podéis consultar la historia del puente online, una peli ganadora de 7 Oscar y basada en hechos reales.

Nos comimos un heladito, mientras se acababa de poner el sol y veíamos a los locales como pasaban el día en familia paseando por las orillas del puente.

Una gran leyenda Rio Kwai

Si todo este día fue una locura..la vuelta en coche, lo fue aún más.... Qué miedo! Adelantamientos de camiones que se les caían los troncos que transportaban.... 3 personas en una moto haciendo imprudencias mil....Pero lo bueno de todo, es que entre todo ese caos, ellos se aclaran. Es una locura. Pero bueno, aquí estamos :D

Esta noche teníamos reservado para ir a Sirocco, pero como hay que reservar con antelación y ese día llegamos tarde a todos los sitios, y encontrar un taxista que no te tome el pelo es una odisea, luego el trafico.......pues no llegamos a tiempo y tuvimos que cambiar nuestro destino:

Así que decidimos ir a Torre Baiyoke, el edifcio más alto de todo Bangkok, en el que puedes tener una vista panorámica de la ciudad 360 grados mientras te tomas algo.

Aunque la verdad el bar, nos decepcionó bastante. Bastante cutre todo, no sé si es que en Barcelona estamos acostumbrados a espacios más cuidados, y modernos. Pero ni las copas valían nada, ni el local en sí, ni las palomitas de antes de ayer que acompañan las copas.

Así que en cuanto lo vimos, fuimos a dar una vuelta por el barrio, habían mercadillos nocturnos y bastante ambiente, tiendas abiertas por la noche, y decidimos entrar en un Mc Donalds a comer algo...

Wow.. En cada país hay que entrar en un Mc donald's, es divertido ver como se adaptan a cada cultura, las hamburguesas son diferentes, la cocacola y patatas saben diferentes...las salsas! En definitiva, hay que probarlo :D

Día 4 Mercado flotante Damnoen Saduak

Mercado flotante Saduak

Como con el taxista que realizamos la excursión el día anterior, quedamos muy contentos de cómo se portó, nos hizo de guía, amigo e intentaba que disfrutáramos de cada momento que pasamos con él, quedamos con el otra vez para ir a visitar el Mercado flotante de Damnoen Saduak, a unos 100km de Bangkok.

La barca del amor

Esta vez, puntuales todo el tiempo, sí señor. Nos llevó primero a un mirador muy cerca del mercado flotante, dónde nos dieron fruta fresca, bueniiiiiisima, y nos abrieron un coco para refrescarnos, mientras esperábamos nuestra barquita.

Coco a la tailandesa

Nuestra barquita, primero nos llevó a una fábrica de azúcar, donde nos explicaron cómo los locales extraían el agua de coco, para fabricar azúcar. Muy rico, muy interesante. Luego tenia una tiendecita con objetos de madera artesanales muy bonitos.

Fabrica de azúcar

El mercado está bien, es curioso y lo habrás visto mil veces en callejeros viajeros o en Frank de la Jungla. Aunque de hecho, hay muchos más cerca de Bangkok, éste es el más grande, más conocido y más turístico. Por lo que seguramente ya os podréis imaginar que no era precisamente barato comprar aquí, pero ya que habíamos venido, pues, algo cayó.

Comimos en un local que nos recomendó el barquero, y bueno, más de lo mismo. Arroz y pollo!

Arroz con pollo!

Nos dio una vueltecita por los canales, precioso paseo para bajar la comida, camino de los manglares, podíamos ver cocodrilos, pájaros de todos los colores, serpientes de agua...hacía un día fantástico para disfrutar de todo esto.

Preciosos canales de Chao Praya

Así que quisimos probar un tailandés que habíamos visto, en la zona comercial de Sukhumvit, y la verdad, acertamos con Chilli Culture Thai Kitchen, hay que ir con mucho cuidado con el picante...pero riquísimo todo! Lo único malo que puedo decir del local es que tenían el aire acondicionado a tope, pero puedo decir que esto era en tooooodos los locales, centros comerciales....buuf! se pasan!

Cena tailandesa

Así que un día más, listos! Al día siguiente, nos esperaba la antigua ciudad en ruinas....